Por: Susana Dumit Garciarreal
Mi despertar espiritual, la primera vez que lo hice a conciencia fue el día que nació mi hijo, a partir de ahí se quedó una puerta abierta, porque me aferré a tener fe y a confiar en mis guías, ángeles, Dios, universo para que mi hijo pudiera salir del hospital, aunque también hoy por hoy sé que mi hijo decidió nacer y revivir, salir del hospital y seguir con nosotros.
Pero desde entonces me siento más sensible en muchos sentidos, creo que también es por el cambio de perspectiva de lo que es la vida, vivir un día a la vez y aprender a disfrutar lo más sencillo de la cotidianidad, porque al valorar lo que sí tenemos podemos tener la capacidad de ser agradecidos y ahí es cuando comienza esa conciencia espiritual, o por lo menos así ha sido para mí. Recuerden que lo que comparto con ustedes es desde mi perspectiva y mis experiencias.
El fin de semana pasado viví un momento hermoso en una Ceremonia Budista, donde el Lama nos compartía mensajes llenos de amor y uno de ellos fue todas las religiones tienen un mismo objetivo, existe un solo Dios y un mismo universo, si actúas bien la vida te dará cosas lindas y bendiciones, pero si actúas mal también habrá consecuencias, y no por hablar de un Dios que castiga, más bien hacernos responsables de nuestros actos y pensamientos.
Todos tenemos dones que deberíamos aprender a desarrollar, el mundo necesita más humanidad, el futuro de nuestros hijos, las generaciones que vienen detrás de nosotros merecen disfrutar un planeta con personas más empáticas, amorosas y espirituales. No hablo de esa espiritualidad que busca siempre la felicidad sí o sí, eso no es ser espiritual (por lo menos no para mí) me refiero a tener un Ser superior en quien confiar plenamente, pero al mismo tiempo no esperar a que nos resuelva la vida, es un trabajo propio, conlleva responsabilidades, pero es maravilloso sentirse acompañado y si uno quiere encontrar señales, mensajes, amor en la fe que elija es válido y todos deberíamos respetar eso.
“Recuerda que algunas veces los milagros, son personas”
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Apertura Intelectual 
Sí todos realmente tuvieramos mas empatia, sensibilidad, humildad y amor por los demás, otro mundo tendriamos
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