Por: Luis Roberto Peralta Hernández
El pasado martes 1 de octubre de 2024 se llevó a cabo la sucesión Presidencial en nuestro país. Atrás quedó un sexenio por demás polémico. Polémico en virtud de que quien heredará el ejercicio del poder es querido y aprobado por mucha gente, por el contrario, hay una gran cantidad de personas que estaban ávidos de que este sexenio concluyera.
Sin lugar a dudas fue un periodo presidencial en el que, como nunca se ha polarizado a la sociedad, se ha marcado una gran diferencia y encontronazo de las formas de pensar de la ciudadanía. El cambio por demás necesario y sobre todo ordenado en términos de nuestra Constitución Federal», parece ser únicamente de nombre ya que se pretende continuar con las ideas, la influencia y el camino marcado por el gobierno saliente.
La Doctora Claudia Sheinbaum Pardo, se convirtió en la primera mujer que ocupa el cargo más importante de la nación mexicana. Con 62 años de edad teniendo una formación profesional de Licenciada en Física, Maestra en Ingeniería eléctrica y Doctora en Ingeniería en Energías todas ellas en la máxima casa de Estudios de la UNAM, cuenta con la preparación académica que sin lugar a dudas, acompañada de su larga trayectoria en política al política mexicana, podrá constituir un verdadero cambio.
Como ya fue menciona la Doctora Sheinbaum es la primera mujer presidenta de nuestro país, sin embargo, es la titular número 87 del Poder Ejecutivo del México independiente, considerando gobiernos paralelos, reelecciones y personajes que ocuparan la presidencia en dos ocasiones o más. Siendo la Presidenta Constitucional número 22, en términos de la Constitución del 1917, es decir, en el periodo post revolucionario.
En la actualidad, alrededor del mundo son 27 los países gobernados por mujeres. En el continente americano fue María Estela Martínez de Perón la Primera Mujer Presidenta precisamente en Argentina por allá de 1974 quien accedió a la poder tras la muerte de Juan Domingo Perón a quien acompaño en la fórmula como vicepresidenta. La primera mujer electa como Presidenta directamente fue Violeta Barrios de Chamorro de Nicaragua en 1990.
El reto para cualquier persona que ingresa al ejercicio del poder es sumamente complicado, independientemente de la filiación partidista, es una persona cuya investidura está constantemente bajo la mirada y todo y ha de estar preparado para trabajar bajo presión. La Presidenta Sheinbaum tiene a su favor que, a diferencia de por lo menos lo últimos 4 o 5 Presidentes, tiene en las Cámaras un bastión para el ejercicio del poder, como en los tiempo de auge del priismo, parece ser que no cuenta con ningún freno ni contrapeso en el legislativo. El poder Judicial es, hasta ahora, quien sirve de resistencia al embate del partido hegemónico, motivo por el cual, los últimos meses ha estado en el ojo del huracán pretendiéndose modificar a partir de la denominada Reforma Judicial, tema que ya ha sido abordado dentro del presente espacio, y que al día de hoy sigue siendo motivo de controversias.
Por otro lado, el gobierno saliente tuvo muchos detractores, sin embargo, gracias “al carisma” del ex Presidente López Obrador, hay quienes increíblemente mencionan que lo van a extrañar, lo que trae como consecuencia que la Presidenta actual pueda utilizar ese envión a su favor, aunque claramente no cuenta con las misma popularidad ni empatía de quien le sucedió. Además, veremos si marcará línea diferente o solo se limitará a continuar con el esquema sin proponer algo propio ¿Qué hará nuestra Presidenta?
Es de todos conocidos, que la Dr. Sheinbaum recibe un país convulso, dividido, con muchos problemas sociales, económicos y políticos. Los recursos que buscan detener por la vía legal la llamada reforma judicial, poco a poco se acaban, la resistencia sobre ese particular mayoritariamente por parte de los trabajadores del poder judicial y círculos académicos poco a poco se diluye. Actores políticos insertos los poderes legislativo y judicial están en constante conflicto que desafortunadamente parece ajeno a nosotros pero que sin lugar a dudas marcará el rumbo de nuestro país. Hay quienes a la ligera en ambos frentes mencionan la palabra que estamos viviendo un “golpe de Estado” sin conocer la gravedad del caso. Tema que si me permiten con el favor de su lectura será abordado en la siguiente colaboración.
El eventual paro total del poder judicial es el equivalente a una renuncia o suspensión de actividades del Presidente, no se si en realidad la sociedad lo está dimensionando.
Por ahora, la Presidenta no ha marcado una ruta clara que permita entender que se desmarcará de su antecesor, sin embargo, los primero días de su gobierno no vislumbran el poder conocer la personalidad propia de su gobierno. Comienza a darle mayor importancia a la innecesaria “solicitud de perdón” de la monarquía española que a la gravedad de las situaciones tanto en Acapulco como en Culiacán. Sigue refiriéndose a López Obrador como el Presidente.
De verdad deseo mucho éxito a la labor del Doctora Sheinbaum como Presidenta de México. Estoy seguro que muchos de nosotros estaremos trabajando día con día para ser mejores, llevar lo necesario a nuestros hogares, situación que por supuesto beneficiará al gobierno. Ojalá no desperdicie la oportunidad de demostrar que en toda la historia de nuestro país en la que hemos sido gobernados por el género masculino, era necesaria, como en muchos ámbitos de la vida, la intervención de las mujeres para el mejoramiento de la sociedad.
“Si tus acciones inspiran a otros a soñar, a ser, a aprender y a hacer más, eres líder.”
John Quincy Adams
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