
POR: THELMA MORALES GARCÍA
Inicia el mes de septiembre, el mes patrio y ello me hizo recordar a una de las más destacadas historiadoras en México; la Doctora Josefina Zoraida Vázquez es reconocida investigadora Emérita del Sistema Nacional de Investigadores 1993; Premio Nacional de Ciencias y Artes, 1999; Profesora Emérita de El Colegio de México, 2002 e investigadora nacional de Excelencia del SIN, 2003. También la recordamos porque la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos, le solicitó un libro para la conmemoración del Bicentenario del nacimiento de Benito Juárez titulado “Juárez, el republicano”.
Sus enseñanzas sobre la historia, nos hacen reflexionar sobre cómo ha cambiado la forma de ver la historia en la actualidad, no es la que en visión de especialistas como Edmundo O’ Gorman, Vicente Riva Palacio y Justo Sierra quienes entonces dividían a la historia entre buenos y malos.
Hernán Cortés era visto como hombre malo, cuando sabemos que era un hombre del Renacimiento. Tenemos que acabar con el psicoanálisis del país (¿por qué somos como somos?) debemos aceptar nuestro pasado.
Hombres como Justo Sierra y Rébsamen buscaban una historia que nos uniera, pues en la actualidad tenemos un país muy lastimado; Edmundo O’ Gorman se preguntaba: ¿Qué sentido tuvo la Independencia de nuestro país? El contraste social que existía en aquella época era menos peor que el de ahora. Tenemos la obligación de reflexionar sobre este acontecimiento profundamente ¿Realmente nos hemos independizado?
Hidalgo hirió de muerte al Virreinato, pero el pecado de Iturbide es no haber cambiado las estructuras de nuestro país, cuando pudo hacerlo, ya que era totalmente aceptado y admirado en su tiempo al llegar al poder. La insurgencia fue muy costosa para nuestro país, ya que murió la mitad de la mano de la fuerza de trabajo. El resultado de la independencia de México fue la Constitución de Cádiz que sirvió de modelo para los países europeos. Por eso debemos tomar lecciones del pasado y aplicarlas al presente.
Debemos recordar que los maestros del siglo XIX trataban de conmover a los niños con historias como la de Juárez que se fue de su casa por perder un borrego. Los niños de hoy son diferentes y los jóvenes de hoy viven el presente inmediato.
Por lo tanto, debemos ver a nuestros héroes dándoles un significado y reflexionar sobre nuestro pasado. Debemos desarrollar una idea positiva de México con un proyecto común y una forma de decir ¿Cómo nos vamos a independizar verdaderamente como país?
La cita de Edmundo O’ Gorman nos da elementos para reflexionar sobre nuestra historia: “Que júbilo y qué descanso si en la prensa, el radio, la televisión y el cine; en la escuela y en los gabinetes oficiales; en las celebraciones patrias y en los recordatorios de aniversarios, se dejara escuchar el idioma conciliador de una conciencia histórica en paz consigo misma, o si se prefiere, de la convicción madura y generosa de que la patria es lo que es, por lo que ha sido, y que si, tal como ella es, no es indigna de nuestro amor, ese amor tiene que incluir de alguna manera la suma total de nuestro pasado. No sé si me equivoco, pero si sé decir que así entiendo el amor del historiador por su patria y que así, en la medida de mis fuerzas y de mis luces, la he amado.”
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