| 23 DE SEPTIEMBRE DE 2025 | La tercera administración y el eco de los 43: ¿habrá justicia? |
POR: VÍCTOR MANUEL REYES FERRIZ
En pocos días se cumplirá el funesto 11vo aniversario de la desaparición masiva y forzada de los 43 estudiantes de la Normal Rural “Raúl Isidro Burgos”, donde se manejaron infinidad de hipótesis que permitieron a la administración de Peña Nieto, entregar la conocida “verdad histórica”; luego con Andrés Manuel, se creó la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa y en el segundo informe ya casi al cierre de su periodo, el entonces encargado Alejandro Encinas, dictaminó que fue un “crimen de estado”; ahora, este 26 de septiembre será el primer aniversario de la desgracia en comento, que estará al frente del Poder Ejecutivo una nueva titular. ¿Qué pueden esperar los padres de los estudiantes? ¿Qué verdad nueva se inventarán? ¿Sheinbaum hará una verdadera diferencia?
El pasado 4 de septiembre la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo recibió, en Palacio Nacional, a los padres de los 43 estudiantes desaparecidos en la noche y madrugada del 26 al 27 de septiembre del año 2014, con la finalidad de realizar el quinto encuentro entre ellos y proporcionar información sobre los avances que se tenían; empero, resultó en una reunión “algo decepcionante para los padres” según informó Isidoro Vicario el nuevo representante y portavoz, luego de la renuncia de Vidulfo Rosales Sierra quien los acompañó durante estos casi 11 años en la lucha para pedir que se esclareciera el caso y se les diera atención a las familias de los normalistas, y de quien, su salida, podría verse como una conquista más de la 4T ya que en palabras del abogado, dejaba su cargo en el Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan así como, la representación del colectivo “Nos faltan 43” por razones personales y de salud pero, tan solo un mes después, se integra de lleno a la Suprema Corte de Justicia de la Nación por invitación del Ministro Presidente, Hugo Aguilar Ortiz para que se incorpore como Secretario de Estudio y Cuenta en la ponencia del presidente de la Corte. ¿Sólo a mí me suena algo turbia esta designación? ¿Es una operación hormiga para ir callando voces poco a poco?
Personalmente, este caso me divide en dos opiniones generales porque por principio de cuentas no podemos separar el hecho que generó esta tragedia que fue, el secuestro de camiones por parte de los estudiantes para asistir a la manifestación del 2 de octubre en la Ciudad de México; situación que de entrada es un acto delincuencial, se debería perseguir como cualquier otro acto en cualquier lugar del territorio nacional; empero, al haber tenido un final sumamente grave, la acción inicial quedó en el olvido y completamente justificada, al menos, para la opinión pública. Esto me parece muy grave porque es el actuar generalizado del mexicano, se perdona y justifica alguna acción si es que existe un “bien mayor”, o bien, para aquellos casos donde una actividad ilegal culmina en una tragedia, lo que, por supuesto no debería ser exculpado ni por una, ni por la otra razón.
Ahora bien, haciéndonos de la vista gorda del delito que cometieron estos estudiantes, que dicho sea de paso, es una tradición y jamás han sido perseguidos como células delincuenciales, por supuesto que acribillar, desaparecer y matar a cualquier persona por manos de las autoridades es un acto repulsivo, indignante, castigable y cuando menos de no grata sorpresa para los habitantes de cualquier país, porque si eso que sucedió es provocado por quienes tienen la obligación de cuidarnos ¿qué podemos esperar de quienes se dedican a la criminalidad?; empero, aún más preocupante es el hecho de que no han sido sancionados, o al menos no los verdaderos orquestadores de la desaparición masiva de los estudiantes.
Han existido infinidad de versiones que van desde la infiltración de algunos de esos estudiantes en grupos criminales y que por eso fue un ataque realizado por un bando rival; una rencilla añeja del entonces alcalde de Iguala, José Luis Abarca Velázquez, hasta la implicación de altos servidores públicos de los ámbitos municipales, estatales y federal en el trasiego de drogas y por ello, los autobuses que fueron secuestrados por los estudiantes eran realmente lo que las autoridades corruptas buscaban, porque ya se encontraban cargadas con el producto y listo para su distribución. Sea cual sea la verdadera circunstancia que detonó todo esto, lo cierto es que conforme pasan los años, nuestras instituciones mexicanas han ido perdiendo la poca fiabilidad que en algún momento tuvieron, y probablemente lo más triste después del asesinato, es la pérdida de la verdad, porque lo único que nos restriega en la cara es que como sociedad somos los títeres de quienes dirigen cada una de esas instituciones.
A lo largo de la historia de nuestro país, hemos podido comprobar que no importa el color del partido político que ocupe las titularidades, porque el pan nuestro de cada día es proporcionar la información a cuenta gotas y direccionada hacia donde mejor convenga a los intereses políticos, lo que por supuesto viene avalado por las voluntades de las “oposiciones” que aprovechan cualquier suceso complejo o complicado que se presenta en una administración contraria, para llevar agua a su molino, entonces, esta práctica de gobernanza ha calado y se ha institucionalizado a través del tiempo, para que, quienes vayan a llegar, sepan cuál es el camino, cómo deben comportarse y sobre todo, no vayan a rajar porque están embarrados todos.
Probablemente lo que más me llama la atención, conmociona y preocupa es aquella vertiente de la implicación de los militares, fuerzas policiales y funcionarios de altísimo nivel en cuanto a ser permisivos y beneficiarse por supuesto económicamente del tráfico de drogas que, en caso de ser cierta, puede darle un sustento bastante fuerte a muchas de las cosas que han pasado y se han incrementado año con año, como por ejemplo, que en las elecciones de cualquier ámbito, el crimen organizado sea quien decida a los candidatos, pero también ahora en la recién implementada elección de jueces del Poder Judicial, en la estratosférica cantidad de fosas clandestinas y desaparecidos en nuestro país que se incrementa todos los días, en las elevadas cifras de muertos que reporta cada madrugada el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en fin, cada día lo comenzamos con noticias desafortunadas y con las mismas, nos vamos a dormir para hacer de esto un bucle que no tiene fin y que desafortunadamente no vislumbro que pronto, pueda llegar a cambiar.
Bajo esa misma premisa han aparecido múltiples análisis, artículos, documentales e incluso series de televisión que, señalan con mucha seguridad que la complicidad para la realización de estos actos, no solo es de manera interna en México, sino que existe implicación gubernamental extranjera, lo cual, bueno pues ya parece como la caja de Pandora y nos deja a la deriva en cuanto a qué es lo que podemos hacer para revertir este rumbo que lleva el actuar de nuestros gobiernos y una posible solución tal vez, es precisamente una propuesta que hizo la presidenta Sheinbaum a los padres de los estudiantes de la normal, y es que conformaría un grupo de expertos internacionales, que aunque suena un poco a retroceso puesto que así inició esta investigación con el GIEI, ahora sería a cargo de la ONU, no sé qué tanto confiar también en aquel organismo internacional, pero pues si comienzan a investigar y llegan nuevamente al punto de tocar al ejército mexicano y se terminan las investigaciones, al menos confirmaríamos que esa es precisamente la verdad que todos estamos esperando.
Finalmente, el estado de indefensión de los mexicanos cada día es mayor, desde instituciones que se han eliminado en el último lustro hasta reformas al proceso constitucional del juicio de amparo, los mexicanos hemos estado perdiendo la capacidad de podernos defender ante los actos de autoridad, así que nuestra única defensa, al menos hasta el día de hoy que escribo estas líneas, es la democracia que poca, pero sigue viva, por lo que cuando tengamos que acudir a las urnas, pongo la esperanza en que después de todo lo vivido, el mexicano comience a generar algo de criterio.
DATO CULTURAL.
Un día como hoy en 867 en Bizancio, Imperio Romano de Oriente (actual Turquía), sube al trono el macedonio Basilio I, tras asesinar al emperador Miguel III quien fuera su protector, con lo que da inicio a la dinastía macedónica y que durante este periodo se expande territorialmente el imperio y se consolida como una de las mayores potencias militares en Europa; en 1859 en Barcelona, España, el empresario, ingeniero, intelectual, inventor, periodista, pintor y político Narciso Monturiol Estarriol presenta al mundo la primer inmersión pública de su submarino llamado “Ictíneo”, el cual, se mantuvo por más de dos horas bajo el agua. La propulsión de dicho submarino se realizaba mediante el empuje y fuerza de dos personas dentro de la nave; en 1939 fallecía en Londres, Inglaterra, el escritor, filósofo, médico, neurólogo, psicoanalista y psicoterapeuta austriaco Sigmund Freud, quien, desde 1923 obtuvo un diagnóstico de cáncer mandibular.
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